Lo que tenga que ser, que sea

 Estaba hablando con una amiga, creo que pocas veces somos conscientes el poder de la conversación con una amistad. Con el simple hecho de hablar se van abriendo ventanas de colores que nos iluminan un poco y nos dan claridad. Me hace acordar a cuando Platón salía a la calle a hacer filosofía, desde la conversación nace una revelación. Conversar es revolucionar.

Bueno volviendo al eje, mi amiga me mira y con una sonrisa en la cara me dice: “ Bueno tranquila, lo que tenga que ser que sea y lo que no por algo será”.

Puede parecer resignación pero en realidad nos recuerda que tenemos que confiar en el devenir del misterio. Muchas veces hacemos juicios apresurados de las cosas que nos pasan cuando a veces el tiempo o la distancia nos muestran que no era tan así, tan blanco o negro, tan malo o tan bueno. 

Creo que es una buena frase para recordar en momentos oscuros, de incertidumbre. Revela una perspectiva filosófica de aceptación y redención ante el presente y un devenir futuro que es totalmente desconocido. 

No controlamos nada y está bien que así sea. Por algo fue así. La vida es lo que percibimos de ella, y mayormente tiene que ver con la carga emocional con la que afrontamos los hechos. Basta con esperar un poco, ver “el diario del lunes” y volver a reflexionar. 

Solo sonrío al imaginar una futura conversación con mi amiga, en la cual recordando el pasado con miradas de complicidad, entendamos que así tenía que ser.